¿Ha pasado o está atravesando por un período de profunda tristeza? ¿Han habido momentos donde siente que nadie lo entiende, que su dolor es tan profundo que no hay quien pueda comprenderlo?. Ya sea por la pérdida de un ser querido, la pérdida de una «buena» amistad, por el desempleo, porque ha sido traicionado, porque lo están humillando.

Las razones para su tristeza pueden ser muchas, el sentimiento de tristeza quizá sea superficial o muy profundo; hoy le digo: Cristo es su salida porque: Cristo es el camino, Cristo le entiende, Cristo tiene poder, Cristo es el mismo de ayer, hoy y por los siglos.

Se podrá preguntar : 

¿Por qué  Dios permitió que esto me sucediera?

Las situaciones en esta vida nos suceden porque vivimos en un mundo lleno de maldad, de pecado; es la naturaleza de la condición pecaminosa del mundo. Seguir a Cristo o estar con Cristo no nos hace inmune a padecer algún tipo de sufrimiento.

En  San Juan 16:33 Jesucristo nos dice esta verdad: En el mundo tendréis aflicción, pero confiad yo he vencido al mundo.

Así que no se trata de que Dios es malvado y permite que nos sucedan cosas malas, todo lo contrario DIOS ES INMENSAMENTE BUENO porque aun siendo pecadores no nos trata como tal, sino que nos dio la salida en Cristo, nos dio la bendición de ser salvos por su amor infinito.

¿Cómo es que Cristo me entiende?

Al venir a esta tierra, él vivió y sintió cada emoción humana, fue tentado como todos nosotros, pero Él NO pecó; esto significa que Él entiende perfectamente nuestro sentir de dolor, Cristo tuvo tristeza en diferentes ocasiones al estar acá en la tierra.

Juan 11:33-35 : Se entristeció cuando uno de sus mejores amigo murió, se compadeció con el dolor de las hermanas y los amigos de Lázaro que lloraban tristemente por él, lloró por la muerte de su amigo.

Lucas 19:41-44 Lloró por la ciudad de Jerusalén, por la ceguera espiritual de los lideres religiosos, por todo lo que acontecería y acontecerá a esta ciudad, por la dureza de sus corazones.

Marcos 14:33 Tuvo tristeza y angustia antes que lo arrestaran y lo llevaran a la cruz, a pagar por los pecados de todos nosotros.

Jesucristo entiende a la perfección su sentir, y lo más grandioso es, que el trae bálsamo, nos da paz que sobrepasa todo entendimiento, trae gozo, trae consuelo, él pone amor donde no hay, Él es El Camino.

Entréguele su dolor a Cristo, él está esperando con los brazos abiertos, nos ha dejado a su Santo Espíritu para que nos consuele.

Jesucristo es ese alguien en quien usted puede confiar y estar plenamente convencido que no le fallará jamás, porque el cumple todo lo que promete.

Allí donde está, háblele y dígale : Señor quiero conocerte, te entrego mi dolor, si realmente eres verdad, toma mi dolor y dame paz, dame gozo Señor, te entrego mi corazón, eres mi refugio , no tengo donde ir, clamo para que quites toda duda en mí, Señor respóndeme, he escuchado que tu respondes a quien te clama. Amen

¡Dios le bendiga!