¿Le han encomendado algo en la obra del Señor?, ¿Le han dado palabra de bendición para su vida?, Quizá le estén diciendo: ¡usted es escogido!, ¡Dios tiene planes para usted!, Dios le está llamando para que cumpla un propósito en Él, Dios tiene un plan para su vida, ese don que usted tiene , Dios lo ocupa para su obra.
Y la respuesta de su parte ha sido : ¿YO? ¿A MI?
Y en muchas ocasiones añadimos: !No, yo no!, !No, no creo, eso no es para mí!, ¡mmm, no sé, no estoy hecho para eso!
Leamos lo que nos dice El Señor en su Palabra.
Jeremías 1:5 NVI Te conocía aun antes de haberte formado en el vientre de tu madre; antes de que nacieras, te aparté y te nombré mi profeta a las naciones.
Salmos 139:16 NVI Me viste antes de que naciera. Cada día de mi vida estaba registrado en tu libro.
Veamos el caso de Moisés, el escogido de Dios para liberar al pueblo de Israel, este pueblo tenía 400 años de ser esclavo en Egipto.
Éxodo 2:12 Entonces Moisés miró a todos lados para asegurarse de que nadie lo observaba, y mató al egipcio y escondió el cuerpo en la arena.
Moisés creció en la casa del faraón, ya conocemos la historia, peor al ser adulto cometió asesinato en defensa de uno de los de su pueblo; huyó lejos de Egipto, huyó del faraón, se alejó del lugar donde iba a cumplir su propósito en Dios. (Éxodo 2)
Moisés se fue a otra región, allá se casó, aprendió a ser pastor de ovejas en el desierto, vivió allá 40 años. Un día Dios se le apareció de forma sobrenatural y lo encomendó para regresar al lugar donde debía hacer la tarea asignada. Sin embargo, Moisés no se sentía preparado para la comisión de Dios, le puso muchas excusas a Dios, antes de ir a realizar la labor asignada.

¿Cuál es su excusa hoy? El Señor dios Todopoderoso va delante de nosotros, El nos escogió desde el vientre de nuestra madre, para un propósito en Él.
Con los dones que tiene, con los instrumentos que le ha dado, usted puede servir en la obra del Señor donde sea que esté.
Usted es especial y vale la sangre de Jesucristo es Hijo de Dios. Si se ha alejado de Él renueve su corazón delante del Señor, si nunca a aceptado a Cristo, entréguele su corazón, allí donde está dígale:
Señor reconozco que soy pecador, que te he fallado, reconozco que eres el Hijo de Dios y que tu eres el único que salva de todo pecado, que limpia todo pecado, creo que en ti soy escogido de Dios Padre, por favor inscríbeme en el libro de la vida, quiero ser salvo por tu amor. Gracias Señor por rescatarme aún cuando he sentido que no lo merezco, tu me das valor. En nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo. Amen.
¡Dios le bendiga mi amado!

Gracias por su apoyo en nuestra página Blog. Deseamos que El Señor Dios Todopoderoso conceda los anhelos de tu corazón. Recuerda lo más importante es que CRISTO te ama.
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